SINOPSIS: Tres mujeres han aparecido salvajemente asesinadas en sus propios dormitorios. El responsable de estos crímenes actúa siempre los sábados, de madrugada, y deja muy pocas pistas. De manera que cuando la doctora Kay Scarpetta, jefa del departamento de Medicina Legal de la ciudad, recibe una llamada a las 2.33, supone que algo grave ha sucedido: hay una cuarta víctima. Kay Scarpetta recurrirá a los últimos avances en medicina legal y tendrá que vérselas con aquellos que quieren sabotear su trabajo…
Año: 1991
Páginas: 447
Patricia Cornwell es poco conocida en nuestro país, y menos conocida es su serie de best sellers denominada ya la saga Kay Scarpetta, por el nombre de la protagonista de más de veinte libros desde hace más de dos décadas.
El primer libro de esta serie de novelas negras es Post Mortem –o sea el Scarpetta #1 –que fue lanzado originalmente en 1991 es un comienzo exitoso de unas historias donde prevalece el ambiente forense, científico y policial.
En Post Mortem conocemos a Kay Scarpetta, una forense de carácter pero sumida en varios problemas administrativos y de mentalidad que se hacen patentes en un comienzo, pero que logran dispersarse durante su desarrollo, como la mirada misógina de la sociedad culturalmente masculina, más si ella misma está sumida en un mundo mandado pro hombres, como es el policial y científico.
Puede ser un punto en contra el, a veces, excesivo uso de terminología y explicación técnica que se hace en descripciones o profundizaciones de temas o actos, pero para los que son fans de series de televisión como Bones o CSI, este libro será un deleite.
Post Mortem ofrece un argumento simple, pero un desarrollo algo complejo, que logra un resultado que hace meternos en la historia rápidamente, con el juego de poderes entre forenses y detectives que se hace muy entretenido.
Cornwell nos adentra en un mundo ya muy conocido en la novela negra, pero desde un punto de vista médico y femenino que está brillantemente contado y hace de esta una excelente primera novela para una saga que sólo sabe de éxitos.
