SINOPSIS: Basado en el anti-héroe menos convencional de la Marvel, Deadpool narra el origen de un ex-operativo de la fuerzas especiales llamado Wade Wilson, reconvertido a mercenario, y que tras ser sometido a un cruel experimento adquiere poderes de curación rápida, adoptando Wade entonces el alter ego de Deadpool. Armado con sus nuevas habilidades y un oscuro y retorcido sentido del humor, Deadpool intentará dar caza al hombre que casi destruye su vida.
Es fácil decir que esta película ha estado en boga, y es que tan solo con sus irreverencias previas al estreno ya ha sido puesta en la mira de fanáticos como de los tantos indiferentes a las películas de superhéroes. Aunque, a palabras de el mismo Deadpool, él no es ningún superhéroe.
Fox y también Marvel,–al fin– se la jugaron por un personaje que se sale de toda regla, si bien los superhéroes fueron y serán una forma de darle esperanza al mundo –además de lavarles un poco el cerebro–, no es este el caso–igual lo es, pero de forma diferente a la normal–. Y definitivamente la factoría de esta cinta tampoco lo es. Podemos ver una intencionalidad absoluta de mostrar violencia, sarcasmo, burlarse abiertamente de la industria y de la misma franquicia de la que es parte Deadpool, entre muchas otras cosas que no son parte natural del políticamente correcto mundo del cine. Y eso es lo que más llama la atención al público, porque simplemente no nos tienen acostumbrados a este tipo de franqueza en la pantalla grande, mucho menos de manos de los que tienen el poder de sentarnos repetitivamente en una sala de cine para ver lo último de lo último.
Si bien la trama no deja de ser la historia de los comienzos de un “superhéroe”,la que es simple e inclusive medio aburrida a ratos, el guion es lo que hace la diferencia por completo. No tan solo en la provocación y obscenidad inherente al personaje –uno que difícilmente tiene comparación con cualquier otro– sino en los recursos que utiliza, parcializando la historia emotiva para dispersarla dentro de la cinta, para evitar aburrimiento en los que fueron a ver principalmente la violencia, por ejemplo, o haciendo que el personaje “interactúe” con el público a través de la pantalla, como si el mismo nos estuviera contando la historia mientras forma parte de la cinta, lo que genera una empatía diferente a la que estamos habituados en una historia heroica.
Ryan Reynolds ES Deadpool, se ha imbuido tanto en el personaje que ya no puedes separarlo de su imagen, es cosa de ver las entrevistas que ha dado respecto a la cinta misma: la ama con locura y pasión y no se molesta en ocultarlo. Pero no es el único que hace un buen papel, en este caso, Ed Skrein –Daario Naharis en Game of thrones– el villano de la cinta, hace una contraparte bastante acertada al personaje en cuestión, sin llegar a opacarlo –empresa casi imposible– pero sí dándole a la cinta un buen contrapeso.
No queda más que decirles que colmen los cines en este “fin de semana del amor” –o en cualquier otro momento–, cabe decir que pueden decirles a las fanáticas del romanticismo que es una historia de amor –técnicamente tiene una historia de amor dentro de la trama…–, aunque no es seguro que estén muy contentas a la salida. Pero no se la pierdan por nada, porque esta honestidad desmedida es algo que venimos esperando hace mucho, aunque sea en una película de ficción heroica.
Director: Tim Miller |
Mi novio muere por el jaja lo llegó a molestar que es gay pero debe ser buenisimo queremos ganar !!
Genial <3
Buen review Naty c:
gracias 😀
Me gusto la explicación de la trama, en mi opinión pienso que el actor es perfecto jajaja vi una entrevista y se nota todo lo que ha hecho para ser el personaje, hasta ahora nada que decir. Estoy emocionadisimo. Esperó verla en el estrenó. Saludos
Cuando la veas ven a comentarnos! Y, sííí, en serio es super loco que ame tanto al personaje, pero contagia la emoción por verlo también