SINOPSIS: Francia, 1826. Lord Cochrane recibe un mensaje de auxilio del profesor Jean-François Champollion, jefe de la Sección de Antigüedades Egipcias del Museo del Louvre. Él ha descubierto un testimonio escrito por Julio César en el 52 a.C., que podría ser la clave sobre la primera aparición del dios extraterrestre, Cthulhu. Pero alguien más está detrás de ese manuscrito; una misteriosa hermandad secreta, encabezada por una alta figura de la Iglesia. Y está dispuesta a todo por conseguirlo. Cochrane deberá luchar entonces contra este nuevo enemigo: los poderosos seguidores de un culto siniestro. ¿Qué peligros encontrará en los cementerios, catedrales y catacumbas de París?
En julio gracias a Me gusta leer llega la segunda parte de Cochrante vs. Cthulhu, esta vez once años después de los hechos narrados en ese libro. El marino más famoso de todos los tiempos vuelve con una nueva aventura que lo llevara a enfrentarse con una hermandad que se encuentra en pleno seno del Vaticano. Vuelve Cochrane y también lo hacen varios de los acompañantes en su batalla contra Cthulhu.
La historia comienza cuando el marino se cuela en el Museo de Louvre para poder conversar con Champollion le Jeune, uno de los hermanos que conoció once años atrás. Este le comenta que ha dado con un manuscrito que podría servir como evidencia de los hechos que vivieron en conjunto y que Cochrane necesita para probar su historia. Sin embargo, cuando una hermandad intenta hacerse con el mismo manuscrito nuestros héroes enfrentarán una lucha de ingenio y fuerza para ver quién lo consigue primero.
Me costó partir con el libro ya que durante las primeras cien páginas no pasa mucho, es más lo que se dice que lo que se hace. Es decir, el marino y el historiador se ponen al día de lo que ha ocurrido en la década que pasaron sin verse. Cochrane hace referencia a hechos vividos en Chile y Perú. Sin embargo, me pareció demasiado largo porque, de verdad, solo eran ellos conversando y contando hechos durante cien páginas. De ahí la historia empieza a agarrar fuerza. No obstante, el mayor problema que me encontré era muy similar: el libro era excesivamente largo. No digo que fuera lento o que estuviera lleno de descripciones, sino que incluso las escenas de acción me parecieron demasiado extensas y con detalles innecesarios del tipo: corrió tres metros, se deslizó por la cornisa, giró en 45 grados para tomar el camino sobre los techos, después de tres pasos se desvió y subió doce escalones (esto acabo de inventarlo a modo de ejemplo). Una escena que podría ser tan simple como llevar a un personaje de A a B se alargaba bastante. Esto provocó que las escenas que debieran ser emocionantes por toda la acción que ocurría se volvieran lentas y perdieran un poco la gracia. Dentro de lo mismo hay otras escenas que no tenían justificación para existir. Una en particular me marcó, ocurre mientras nuestros héroes escapan de las catacumbas y suben por una cuerda. Durante casi dos planas nos describen quién sube primero, a quién le costó, quién solo le dio una vuelta a la soga en la mano y subió, quién dejó pasar primero a quién y así. Hubiese tenido sentido si luego pasaba algo, si el último quedaba abajo o el primero en subir era atrapado, pero no.
Nuevamente, lo mejor tiene que ver con la trama y cómo se esta se armó. En un comienzo pensé que podría ser una historia por completo alejada de la anterior y me gustó ver que no era así, que se seguía volviendo a los hechos ocurridos en el Atlántico (aunque sí que cayó en contarlos demasiadas veces, creo que repitieron lo que sucedió en más de cinco ocasiones). Además, me gustan los hechos y personajes históricos que aparecen ya que da la idea de que la historia podría ser real, de que podría haber ocurrido y que suceda eso es magnífico.
En la reseña del libro anterior dije que me gustó Lord Cochrane y su personalidad. Por desgracia, ahora me pasó algo diferente. Creo que el personaje se volvió tan perfecto que era un Gary Stu (equivalente masculino de Mary Sue). No solo era fuerte, sino que se conservaba muy bien para sus cincuenta años (se lo dice todo el mundo), era casi más inteligente que los hermanos Champollion, era el único que se daba cuenta de todo lo que sucedía y el único que hacía los planes (que por cierto, todos funcionaban casi a la perfección). Me da la sensación de que en un intento de volver al marino en un héroe se pasó al extremo de volverlo aburrido. El personaje absorbe a todos los demás, todos quedan en sombras y pierden importancia a su lado.
El último punto negativo que quiero tocar tiene relación con los personajes femeninos. Que sí, estoy consciente de que en el primer libro no podía haber por razones lógicas, eran militares aislados en una isla. Al ser ficción histórica hay hechos que no pueden alterarse. Sin embargo, esta entrega transcurre en Francia, es decir, agregar personajes femeninos no era imposible. Es cierto que no podrían haber tenido un rol protagónico porque los protagonistas eran militares o historiadores, pero cualquier pequeño aporte hubiese sido suficiente. Es más, aparece la esposa de Lord Bernard que es secuestrada. Es la única mujer que aparece y su rol es ser secuestrada y desmayarse cuando ocurre la acción. Mi vara estaba tan baja que hubiese sido suficiente con que ella misma lograra liberarse de los que la secuestraron y que en medio de la batalla se encontrara con los demás. No era imposible, la historia no se alteraba, pero lograba agregar un personaje femenino fuerte para recordar entre tantos hombres valientes, fuertes e inteligentes que había.
Para terminar, Lord Cochrane y la Hermandad de las Catacumbas nos trae de vuelta al marino más famoso en otra nueva aventura. Para mí no supera al primer libro ya que tuve varios problemas con este. No obstante, no deja de ser una historia bien construida, con aspectos históricos que aportan complejidad a la trama y que puede entretenerlos.
Muchas gracias a la editorial por el ejemplar.
Autor: Gilberto Villarroel
Editorial: Suma de letras – Me gusta leer
N° de páginas: 572
ISBN13: 9789569585494
Idioma: Español
Precio: $18.000
[author] [author_image timthumb=’on’]https://2.bp.blogspot.com/-3vmKTueP7eg/WRtYyNgwN6I/AAAAAAAAJQo/NjNxnZmSIA83SdgvxW_z4lIEYLEWoU7gACLcB/s1600/gilberto.jpg[/author_image] [author_info]Gilberto Villarroel-. Es periodista, productor, guionista y editor. Trabajó en radio Cooperativa y fue corresponsal de Diario 16, diario El Mundo y la BBC. Cursó talleres de cine en Santiago, La Habana y Madrid.[/author_info] [/author]