SINOPSIS: Un guardia italoamericano se convierte en el chofer de un pianista clásico afroamericano, pasando por las distintas sedes de su gira musical, y viviendo el racismo de la época de los años 60 en el sur de Estados Unidos.
Green book es una de las películas más esperadas para nuestra cartelera, con nominaciones en diferentes premios y más de alguno ya ganado, solo queda esperar a ver cuántos de las cinco nominaciones al Oscar se lleva finalmente.
La cinta básicamente es un road trip, con dos protagonistas muy diferentes entre sí y en una época donde aquellas diferencias importaban, y mucho. Desde un principio la cinta hace notar los opuestos, las actitudes que tiene Tony Lip (Mortensen) y todo su entorno con los afroamericanos son evidentes, mientras que Don Shirley (Ali) hace gala de sus dotes musicales clásicos y se comporta de acuerdo a los lugares en los que toca.
Incompatibles en todo sentido, pero complementarios a fin de cuentas. Durante toda la cinta podemos ver cómo se van conociendo y como van creando una camaradería notable, que busca el punto medio entre ambos mundos. Su director no escapa de los clichés, sin embargo su manejo de estos los hace amenos y hasta entrañables, especialmente cuando nos vamos hacia las costumbres italianas de Tony.
Puede ser un camino predecible, de hecho, es difícil que no lo sea, pero el desarrollo de la cinta es lo que encanta al espectador. Las actuaciones de ambos actores son el sostén absoluto de la cinta y el guión los acompaña en cada giro de la trama y en cada lugar dónde deben alojarse.
Con Green book presenciaremos un viaje hacia el entendimiento y la empatía, un viaje difícil hacia varios lugares hostiles, pero que son llevados con el equilibrio perfecto entre la comedia y el drama. Un viaje que encantará a muchos, una comedia dramática que no necesita más que un auto y un libro verde para saber dónde alojarse.
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Director: Peter Farrelly |
