SINOPSIS: Los peligros no han desaparecido para Tree Gelbman. Esta joven heroína se va a dar cuenta de que morir (y revivir) continuamente no ha sido el mayor de sus problemas. Los acontecimientos que se avecinan prometen poner a Tree en más peligros que nunca.
Después del inusitado éxito de Feliz día de tu muerte claramente debía venir una continuación. Sin embargo, la necesidad de profundidad de la trama y los giros que se dan en esta segunda parte, que comienza inmediatamente al terminar la primera, cambiaron un poco el enfoque de terror y suspenso convirtiéndola más en una cinta de ciencia ficción, con algunos momentos de suspenso e, inclusive, acción… lo que no es necesariamente malo.
Ya conocemos a los protagonistas, por lo menos a los principales, Jessica Rothe e Israel Broussard se ganaron nuestros corazones en la primera parte y no cambian para nada el tono en esta segunda entrega. Y en realidad, si lo pensamos, veremos a los mismos actores de la cinta anterior, pero no serán ellos el centro de la acción, en esta ocasión vemos como Phi Vu (Ryan) toma una relevancia mayor en la trama junto a sus compañeros, mientras que los demás quedan en un plano más secundario al ser solo objeto de intrigas.
Sigue impresionando la manera en que un solo día, repetido una y otra vez con algunas variables, logra cautivar de tal manera a la audiencia. En este caso no es la excepción y, a pesar de revisionar muchas escenas, siempre se les da un toque distinto en donde la comedia se mezcla con el suspenso y la acción. Los giros que toma la trama a veces impresionan y a veces parecen inverosímiles, pero pierden relevancia ante la inminente resolución de alguna de las intrigas y se pueden pasar fácilmente por alto.
Feliz día de tu muerte 2 termina siendo una fiel seguidora de su primera parte, mantiene los niveles de entretención y el ritmo reinante en la primera, obligando al espectador a estar atento a cada variación que tiene la historia. Si bien se cae un poco en las bases, el castillo que construye basta para encandilar al público y hacer que salgan de la sala con una sonrisa en la cara.
Director: Christopher Landon |
No olviden quedarse a ver la escena post credito.