SINOPSIS: Basada en la exitosa novela homónima de Yoru Sumino, que fue publicada en el 2015, “I Want to Eat Your Pancreas” (Kimi no Suizō wo Tabetai) se desarrolla al final de la primavera, cuando un chico de enseñanza media encuentra un diario en la sala de espera de un hospital y en cuya portada está escrito: “Viviendo mientras muero”. El diario pertenece a Sakura Yamauchi, una popular y alegre compañera de su clase, quien en su diario describe que sufre una enfermedad terminal. Sakura está determinada a vivir sus últimos días al máximo y su alegría por vivir cambiará la vida de él para siempre.
Cada vez es más frecuente ver películas de animación japonesa en nuestros cines nacionales, y es que la gente ha pedido este tipo de producciones y los cines han podido acceder a ellas para mostrarlas en fechas específicas. En este caso, Cine Hoyts tendrá funciones exclusivas de Quiero comerme tu páncreas el sábado 15 y domingo 16 de junio.
Si bien es una historia que sigue muchos clichés de las cintas japonesas, sabe picar la curiosidad desde un principio. Utiliza la técnica de flashback en gran parte de la cinta para mostrarnos, el final en un primer momento, y luego conocer la historia que lleva a ese punto.
Su género principal es el drama romántico, pero también tantea otros temas que generan revuelo como la aceptación de la muerte, el disfrute de la vida y las filosifías que tenemos a la hora de vivir nuestra propia vida, generando que el espectador analice de igual manera cuál es su visión al respecto.
La cinta se divide entre diferentes ritmos, a ratos contemplativos y en otros muy activos. Lo que viene de la mano de la joven protagonista quien acelera el paso constantemente, aunque tiene como contraparte a un joven que analiza la vida y pausa las cosas. Ese vaivén, tanto de ritmos como de puntos de vista, mantiene la tensión durante toda la película logrando que los 108 minutos de cinta se pasen volando.
Quiero comerme tu páncreas es el típico drama romántico que se ve en las películas de anime. Con un tema secundario que refleja mucho sobre su cultura, pero que también se balancea entre dos opuestos que se atraen y no encuentran un equilibrio. Una cinta bella que debería ser vista en la mejor pantalla posible.
Director: Shin’ichirô Ushijima |