SINOPSIS: Los dragones del Edén es ya todo un clásico, fue publicado por vez primera en 1977 y galardonado con el premio Pulitzer. Casi cuarenta años después, conserva toda su frescura e interés. En una impresionante ojeada panorámica que abarca desde la prehistoria hasta la época actual, Carl Sagan explica la evolución intelectual y mental del ser humano, habla de nuestros antepasados y sus antagonistas, describe la mecánica de nuestro cerebro y la de otros animales y dilucida el papel que han desempeñado los ordenadores en el conocimiento de los mecanismos de nuestro cerebro y en el almacenamiento de la información en nuestra memoria. Hallamos también en estas páginas fascinantes incursiones en los terrenos del mito y la leyenda, así como atrevidas especulaciones sobre los cauces futuros por los que parece va a discurrir la evolución del hombre. |
Los dragones del Edén es un famoso ensayo escrito por Carl Sagan en el año 1977 que tuvo mucho éxito en su momento y esta nueva edición lo trae de vuelta. En él encontraremos todo un viaje por la existencia del hombre en la Tierra, partiendo por la explicación de lo corta que ha sido nuestra presencia en este planeta, para luego centrarse en hablar sobre la capacidad de procesar de nuestro cerebro.
Los capítulos 2 y 3 son los que pueden resultar más densos, pues es en estos en que hay muchas explicaciones científicas relativas a la biología y la anatomía, además aquí sienta las bases para conceptos que utilizará más adelante sobre las partes del cerebro y sus distintas funciones. Pasada esta parte comienza a analizar nuestras diferencias con las demás familias animales, el por qué nosotros somos la especie dominante y qué nos diferencia como tal. Luego estudia la evolución de los homínidos y por qué prevaleció un grupo por sobre todo. En la parte final va variando de temas como las diferencias de los dos hemisferios, los sueños, las sociedad, el aborto y la posibilidad de comunicación con una raza extraterrestre.
“El universo es intrincado y fascinante. Arrancamos secretos a la naturaleza por las sendas más insólitas. Por supuesto, las sociedades deberán adoptar toda clase de precauciones a la hora de decidir qué tecnologías -es decir, qué aplicaciones de la ciencia- deben desarrollarse y cuáles no. Pero si no consolidamos la investigación básica, si no se propicia la adquisición de conocimientos por su valor intrínseco, nuestras opciones de futuro quedarán peligrosamente limitadas”
Si bien el ensayo tiene como hilo principal uno cronológico, a grandes rasgos, la verdad es que pasados los primeros capítulos se siente un poco disperso pues toca temas de una manera que se siente casi aleatoria. A veces incluso se centra durante varias páginas en otros que no se sienten realmente relevantes para el punto del libro, o que no aportan demasiado. Es cierto que hay un par de datos interesantes, pero en general no dejó la sensación de haber dicho mucho o que tuviera una gran conclusión a la que llevara toda la discusión.
Es cierto que el enfoque del ensayo es científico, pero Sagan es muy claro para las explicaciones y se toma su tiempo de ir dando definiciones y conceptos que luego vuelve a utilizar. Además, recurre mucho a ejemplos, dibujos y analogías para que sus explicaciones resulten más sencillas de digerir. A lo que se suma que, en general, su tono a la hora de narrar se siente amistoso y ligero, incluso hace de vez en cuando chistes, por lo que no es un libro pesado a pesar del contenido.
“Lo que acredita nuestra condición humana no es lo que parecemos, sino lo que somos. La razón por la que prohibimos dar muerte a otro ser humano debe sustentarse en alguna cualidad peculiar del hombre, cualidad a la que conferimos especial valor y que pocos o ningún otro organismo de la Tierra posee. Es indudable que la humanidad de un ser no viene determinada por el hecho de que sea capaz de sentir dolor o emociones intensas, ya que entonces deberíamos extender ese criterio a los animales a los que damos muerte gratuitamente”
A pesar de que cierta información o datos están obsoletos, por motivos lógicos pues han pasado 45 años desde que se publicó, la verdad es que la opinión de Sagan en varios aspectos resulta bastante moderna. Por ejemplo, suele mencionar distintos experimentos realizados con ratones o primates, que para nosotros son crueles, aunque en esos años era lo normal, sin embargo, menciona lo que se aprendió de ellos sin dejar de lado el aspecto moral detrás. Similar con el aborto, un tema muy complicado hoy en día, Sagan es bastante claro en su opinión, a pesar de que juega a dejarlo de forma ambigua.
Los dragones del Edén es un ensayo que se dedica a analizar lo que conservadoramente llamamos inteligencia desde el aspecto científico y anatómico a lo largo de los años.
Autor: Carl Sagan Editorial: Planeta de Libros – Crítica Saga/Autoconclusivo: Autoconclusivo Género: ensayo | N° de páginas: 264 ISBN13: 9788417854287 Precio: $15.900 |
Carl Sagan (Estados Unidos, 1934 – 1996).- Fue profesor de la cátedra David Duncan de Astronomía y Ciencias Espaciales y director del Laboratorio de Estudios Planetarios de la Universidad de Cornell; Distinguished Visiting Scientist del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) del Instituto de Tecnología de California y cofundador y presidente de la Sociedad Planetaria, la más importante del mundo dedicada a temas del espacio. A lo largo de su vida, recibió numerosas distinciones (Premio Pulitzer, medallas de la NASA, el Premio Apollo, el Premio Masursky y la medalla del Bienestar Público de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos), y un asteroide, el 2709, fue bautizado con su nombre. Al concederle su premio más importante, la Academia Nacional de Ciencias constató: «Nadie ha conseguido nunca transmitir las maravillas ni el carácter estimulante y jubiloso de la ciencia con tanta amplitud como lo ha hecho Carl Sagan… Su habilidad para cautivar la imaginación de millones de personas y para explicar conceptos complejos en términos comprensibles constituye un magnífico logro». |