SINOPSIS: ¿Es posible escapar al destino? 11 de marzo de 2011. Nanami Tendo tuvo que abandonar Miako, su pueblo natal. Ese mismo día, un terremoto resquebrajó Japón y produjo uno de los tsunamis más letales de la historia. Ella sobrevivió, pero su hogar y su mundo quedaron arrasados. Años más tarde, en Kioto, Nanami conoce a un chico extraño que estuvo en Miako el día de la catástrofe y trae de regreso fantasmas y recuerdos que Nami creyó haber dejado atrás. Una historia desgarradora sobre la vida, la muerte, la esperanza y la familia; sobre la identidad y aquellos momentos que nos terminan definiendo como seres humanos. Existen fronteras donde termina la civilización y comienza la naturaleza más salvaje. Nos pueden parecer simples senderos que atraviesan antiguos bosques; la orilla de alguna playa, donde el océano arrulla a la tierra; un torii que indica la entrada a un santuario. Todos esos lugares son grietas entre el mundo de los humanos y otra clase de lugar. En esas fronteras podrías ver accidentalmente a alguien o algo que no pertenece a tu mundo. |
Belén Martínez vuelve a Chile, esta vez con una novela autoconclusiva con un estilo muy de ella, similar a lo que hizo en Cuando reescribamos la historia. Sin embargo, esta vez ambientado en Japón en el 2016, cinco años despues del terremoto y el tsunami que afectaron al país. Belén nos llevará por una historia llena del dolor de la pérdida, pero también de la esperanza del aprender a dejar ir para seguir adelante.
Nami vivía en Miako, pero se tuvo que mudar justo antes del último día de clases, lo que no esperaba era que ese día un terrible tsunami destruyera todo el pueblo. Ahora, cinco años después, es incapaz de volver a ser quién era, la relación con su familia está rota y no tiene esperanza. Sin embargo, cuando conozca a Arishi y descubra que ambos tienen una conexión descubrirá mucho más sobre lo que sucedió.
“Los recuerdos nos hacen ser quienes somos. Y yo me he obligado a olvidar tantos, que ya no sé quién soy.”
El libro logró ser una historía muy propia de la autora, con el estilo de realismo-mágico que le conocimos en sus primeros libros, pero con una ambientación que recuerda a las películas de Makoto Shinkai. De hecho, Después del oceáno logró contar una historia muy al estilo del director, pero con mayor profundidad en la personalidad de los personajes y su evolución. Esto porque la historia se centró mucho más en el trauma de Nami y solo para el final se centró en el componente fantástico y en la acción.
Fue un libro triste, como pueden imaginar, pues se centró en el dolor de Nami y de su familia al perder a todas las personas que conocían. A esto se sumó el que también se perdieron entre ellos, pues no supieron sanar y en vez de atravesar el proceso juntos, lo hicieron por separado y se dañaron mutuamente. Además, estaba escrito con un tono más melancólico como en Cuando reescribamos la historia, lo que fue lógico ya que Nami era quien narraba y era claro que estaba pasando por mucho en ese momento. Sin embargo, no fue triste porque sucedieran cosas así, sino que por el dolor que acarreaban los personajes.
“El mundo, Nami, no se cambia con poderes mágicos, con manos alzadas que detienen tsunamis o paralizan terremotos. El mundo se cambia con pequeñas acciones, con palabras. Y eso ha sido lo que has hecho hoy. Has decidido intervenir, has provocado un cambio. Mira a tu alrededor, mira bien.”
A pesar de todo fue un libro que tuvo mucho sobre la esperanza y de relaciones entre personajes. Estas fueron de lo mejor de la historia, desde la de Arashi y Nami; la de Nami con sus amigos y su familia, y, nuestra favorita, la de Nami con Kaito. En esa relación hubo algo muy lindo sobre las segundas oportunidades y el derecho a madurar y cambiar con el paso del tiempo. Todas las relaciones fueron naturales en el libro, y casi con ese tono más inocente de la infancia y adolescencia.
La historia estaba contada, principalmente, en el año 2016 como el presente de Nami, pero intercalado con el pasado narrado como “olas” que transcurrían en el 2010-2011. Fue con estos capítulos que pudimos ir conociendo más de la vida de Nami en Miako y también detalles que fueron aclarando su personalidad, su relación con otras personas y también detalles que luego tuvieron relación con la trama fantástica. Sobre el aspecto fantástico, sin hacer spoilers estuvo interesante, muy al estilo de Kimi no na wa mezclado con Cuando reescribamos la historia, como dijimos antes este libro es la versión de Belén de una cinta de Shinkai. Básicamente, usó la fantasía con mitología japonesa para ayudar a Nami a que aprendiera a dejar ir para empezar a sanar ella y la gente a su alrededor.
“Está bien no estar bien. Está bien que las cosas te salgan mal, que te sientas cansado, agotado. Está bien aceptar que no puedes con algo. No te sientas culpable, por favor.”
Finalmente, Después del océano es un libro sobre el proceso de pérdida y aprender a sanar después de perder a quienes amas, pero también estar abiertos a las nuevas personas que pueden llegar. Una historia muy humana a pesar de que tuviera un componente fantástico.
Autora: Belén Martínez Editorial: Ediciones Urano – Puck Saga/Autoconclusivo: Autoconclusivo | N° de páginas: 480 ISBN13: 9788417854881 Precio: $21.900 |
Belén Martínez (España, 1990).- Belén Martínez nació un día de invierno en Cádiz, en 1990, y descubrió la magia de las letras cuando era muy pequeña. Desde entonces, no ha dejado de escribir. Estudió Enfermería y, actualmente, compagina su trabajo de matrona con la escritura y la adaptación editorial. Es autora de Lilim 2.20.2003 (ganadora del I Premio Darkiss), Hasta la última estrella, Una sonata de verano (ganadora del I Premio Puck), Cuando reescribamos la historia, Sangre de Dioses y El vals de la bruja es su sexta novela. |