[Review de libro] El viaje de Shuna: una historia que recuerda a las películas más antiguas del director

Después de décadas de su publicación original, llegó a Chile la versión en español de El viaje de Shuna del famoso director japonés Hayao Miyazaki. Una historia que escribió antes de dirigir sus primeras películas, en 1983, y que recuerda al estilo de Nausicaä del Valle del Viento (1984) o La princesa Mononoke (1997) por su diseño y de las criaturas que presenta.

Shuna es el heredero de su pueblo que vive con lo justo. Por ese motivo, cuando un extranjero llegue a sus tierras y le hable de unas semillas que podían crecer en cualquier suelo y evitar el hambre, no dudará en ir en su búsqueda. Así es como empezará su viaje que lo llevará a recorrer distintas ciudades y enfrentarse a peligrosas personas.

Parece innecesario decirlo, pero las ilustraciones son preciosas, si han visto películas del director saben cómo es su estilo y el cuidado que pone en cada cuadro. En particular, como dijimos, esta historia tiene un diseño de ambientación y personajes muy similar a sus películas más antiguas como Nausicaä y Mononoke. Incluso las criaturas que muestra recuerdan bastante a las que aparecen en Nausicaä o en El castillo en el cielo (1986), demostrando que fueron historias que pensó en tiempos cercanos o que reutilizó algunos diseños en sus primeras cintas.

Con respecto a la historia, era tal cual lo dice la sinopsis: se centró en el viaje de Shuna en busca de estas semillas que podrían salvar a su pueblo. Como la clásica historia del viaje del héroe que tuvo que enfrentarse a diversos peligros antes de poder volver con los suyos siendo una versión nueva y mejorada de quién era antes de irse.

Algo que nos pareció interesante fue que Shuna no era un héroe abnegado desde el inicio, pues partió su viaje por su pueblo, pero también por sí mismo, ya que su pueblo podía seguir viviendo así. De igual forma, en un momento salvó a unos personajes, aunque solo después de abandonarlos al principio. Por eso, Shuna fue diferente a otras protagonistas de Miyazaki que tenían una abnegación inherente en ellas como Kiki, Nausicaä o Mononoke. Shuna cruzó una barrera en su búsqueda por las semillas y fue castigado por ello, este viaje le costó caro desde el inicio.

El único punto en contra del libro es su final, pues dio la sensación de que le faltaron unas decenas de páginas para cerrar la historia, ya que el viaje de Shuna no terminó. Además, uno de los temas más importantes que tocó, la esclavitud y los dioses, fueron temas que no se desarrollaron por completo. Es cierto que Miyazaki no da grandes explicaciones en sus películas, pero aquí quedó la sensación de que fue algo que no se terminó de contar, como si faltara una segunda parte.

Finalmente, El viaje de Shuna es una historia corta, muy al estilo del director que recuerda a sus primeras películas, pero con un tono más oscuro. Las ilustraciones son muy bellas, el único problema es que deja la sensación de estar inconclusa y muchos puntos interesantes quedaron sin desarrollo.

“Pero ¿quién puede contener los anhelos de un joven que siente que ha llegado el momento de partir de viaje?”

Hayao Miyazaki (Japón, 1941)-. Es un autor y cineasta multipremiado que cofundó Studio Ghibli en 1985 con Isao Takahata. Entre sus once largometrajes de animación, El viaje de Chihiro (2001) rompió todos los récords de taquilla en Japón y ganó el Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín y el Óscar a la Mejor Película de Animación en 2002. El castillo ambulante (2004) recibió el Premio Osella en el Festival Internacional de Cine de Venecia de 2004. Miyazaki recibió el León de Oro a la Trayectoria en el Festival Internacional de Cine de Venecia de 2005. El viento se levanta (2013) fue nominada a Mejor Película Animada en los Premios Óscar de 2013. Y, un año más tarde, la Junta de Gobernadores de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas le otorgó el Óscar Honorario por su trayectoria. Su última película, Kimitachi wa Do Ikiru ka, se estrenará en Japón el 14 de julio de 2023.