Más de quince años después de la publicación en español de El Imperio Final, llegó a Chile la nueva edición ilustrada. Este libro es la primera parte de la trilogía de la Primera Era de Nacidos de la Bruma, cuya segunda era terminó el año pasado con El metal perdido que forma parte del famoso Cosmere de Brandon Sanderson. Así que si todavía no se animan con esta saga de fantasía, esta puede ser su oportunidad.

Los skaa llevan mil años esclavizados por el Lord Legislador bajo su reinado de terror gracias a los poderes que le entrega la alomancia y que solo los nobles poseen. Sin embargo, cuando Kelsier, el bastardo de un noble y único superviviente que ha logrado huir de los Pozos de Hathsin, arme un plan para acabar con él y reúna a un equipo lo suficientemente loco para intentarlo, quizá exista una oportunidad para los skaa.

“Los hombres raras vez consideran injustificadas sus propias acciones”.

Nacidos de la Bruma es la saga dentro del Cosmere más larga hasta la fecha (en cuanto a números de libros), y que todavía no está terminada, pues se viene una Tercera Era. Sin embargo, hablando de esta era, nos encontramos en un mundo de fantasía del estilo más clásico con toque medieval, con nobles y esclavos y sin tecnología. Lo que diferenció a El Imperio Final de otros libros fue debido al complejo sistema de magia que Sanderson creó: la alomancia. Este sistema consiste en la capacidad de poder consumir ciertos metales y tener los poderes asociados a cada uno, si bien controlar un metal/poder es anormal, un nacido de la bruma es aquel que puede manejar todos los poderes asociados a todos los metales.

La historia del libro se centró en Vin, una joven skaa que ha tenido que ingeniárselas para sobrevivir, pero que un día con ayuda de Kelsier descubre que es una nacida de la bruma y él decide entrenarla y ayudarla a manejar sus poderes. Al mismo tiempo, Kelsier la convenció para unirse a su equipo para vencer al Lord Legislador infiltrándose entre la nobleza. El autor describió este primer libro como My Fair Lady mezclado con un robo. Así que tuvo una trama que logró mantenerse dinámica por ir intercalando todo el entrenamiento de Vin con lo relacionado a la preparación del ataque al Lord Legislador.

“Represento aquello que nunca has podido matar, no importa cuánto lo hayas intentado. Yo soy la esperanza”.

Avisamos que el inicio del libro puede resultar algo abrumador pues Sanderson no cayó en dar un montón de explicaciones sobre el funcionamiento del mundo o el de su sistema de magia. Ambas fueron cosas que como lectores tuvimos que ir aprendiendo a medida que fuimos avanzando con la lectura y que iba avanzando la trama. Sin embargo, fue un libro entretenido y dinámico por ir avanzando en distintos hilos, por lo que siempre estuvo en movimiento y tenía algo que te hacía querer seguir leyendo.

Si bien El Imperio Final es parte de una saga, lo cierto es que esta entrega puede leerse casi sola pues cumplió con toda la estructura de un libro. No obstante, para el final el autor logró entregar un giro que aportó todo un nuevo matiz a lo que leímos y nos dejó con ganas de seguir con las demás partes. En resumen, es un libro que cumplió con entregar todo lo que prometió, pero que, además, entregó un adicional a lo prometido originalmente.

“La fe adecuada es como una buena capa, creo. Si te sienta bien, te mantiene cálido y a salvo. Sin embargo, si no te sienta bien, puede asfixiarte”.

El Imperio Final es el inicio de unas de las sagas de fantasía más famosas de la actualidad que ahora volvió a las librerías con una nueva edición ilustrada y en tapa dura. Si todavía no se adentran en el Cosmere de Brandon Sanderson, esta es su oportunidad para hacerlo.

Brandon Sanderson (Estados Unidos, 1975)-. Es el gran autor de la fantasía del siglo XXI y el escritor más prolífico del mundo. Desde que debutara en 2006 con su novela Elantris, ha deslumbrado a lectores en treinta lenguas con el Cosmere, el fascinante universo de magia que comparten la mayoría de sus obras. Sanderson es autor de la brillante saga Nacidos de la Bruma (Mistborn), formada por El Imperio Final, El Pozo de la Ascensión, El Héroe de las Eras, Aleación de ley, Sombras de identidad, Brazales de Duelo y El metal perdido. Tras El aliento de los dioses, una obra de fantasía épica en un único volumen en la línea de Elantris, inició con El camino de los reyes una magna y descomunal decalogía, El Archivo de las Tormentas, que continuó con Palabras radiantes, Juramentada y El Ritmo de la Guerra (además de la novela corta Esquirla del Amanecer). Con la serie Escuadrón (Escuadrón, Estelar, Citónica y Escuadrón Cielo), Sanderson se acerca, también, a los lectores de la ciencia ficción. Con un plan de publicación de más de veinte futuras obras (que contempla la interconexión de todas ellas), el Cosmere se convertirá en el universo más extenso e impresionante jamás escrito en el ámbito de la fantasía. Con las cuatro novelas secretas que escribió durante la pandemia del COVID-19, Sanderson ha protagonizado la mayor campaña de micromecenazgo de la historia.