SINOPSIS: Will Dormer (Al Pacino), un veterano detective de Los Ángeles, viaja a un pequeño pueblo de Alaska con su compañero Hap (Martin Donovan) para investigar el asesinato de una chica de 17 años. En Los Ángeles queda pendiente un oscuro asunto que les incumbe a los dos. Una vez en Alaska, entran en contacto con el principal sospechoso, Walter Finch, un novelista ermitaño (Robin Williams).
TÍTULO ORIGINAL: Insomnia
AÑO: 2002
DURACIÓN: 118 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Christopher Nolan
GUIÓN: Hillary Seitz (Remake: Erik Skjoldbjaerg)
MÚSICA: David Julyan
REPARTO: Al Pacino, Robin Williams,
Hilary Swank, Maura Tierney, Martin Donovan
GÉNERO: Drama / Thriller
Lamentablemente esta película fue subvalorada y opacada por el gran y largo éxito de “Memento”, su predecesora, y ni siquiera dos grandes estrellas como Al Pacino y Robin Williams la salvaron del cuasi olvido.
Nolan nos trae la película menos conocida de su filmografía, pero que está lejos de ser una olvidable, aunque en intensidad ofrece menos trabajo de profundidad que sus más conocidas, como la ya citada “Memento” o la reciente “Inception”.
“Insomnia” es un remake de un filme noruego que se hizo sólo algunos años después del original, y que supuso una arriesgadísima apuesta, porque el descuidado y a veces fallido guión inicial no tenía la fuerza necesaria para ser interesante, y porque además le agregó mucha más duración al metraje.
Pero aquí el director británico saca a relucir su inteligencia y perspicacia al momento de dirigir, primero con un elenco variopinto pero que encaja a la perfección. Pacino en un rol que sabe interpretar de forma sublime, como un detective viejo, cansado, lleno de culpas calladas. Y Williams como el antagonista que complementa con un personaje silencioso, sagaz y sutil que esconde mucho tras su rostro amable y sonriente.
Hilary Swank, como ha acostumbrado Nolan, tiene un papel menos importante pero que adorna de correcta forma los vacíos que no alcanzan a llenar los dos personajes principales.
“Insomnia” no es tan sorprendente ni espectacular como otros trabajos del director de “Batman Inicia”, pero logra mucho con un material que mejoró con creces, edificando a personajes que se muestran fuertes y quebrados en un abrir y cerrar de ojos, y un guión que se va intensificando como corresponde a un thriller policial.
Wally Pfister realiza un excelente trabajo de fotografía, sacando a relucir una Alaska –que en realidad fue principalmente Canadá –fría, gris, pero a la vez silenciosamente profunda y misteriosa, con planos abiertos espectaculares que se hacen parte de la historia.
Con defectos como unas secuencias de acción muy efectistas, el guión más previsible de su carrera y el personaje de Swank demasiado estereotipado, esta película aún así sobrepasa el promedio y es un entretenido viaje de drama y suspenso, acompañado por el agobiante ambiente sin oscuridad que danza al lado de un Pacino lo suficientemente oscuro para meterse en esa habitación de hotel y sufrir con aquellas persianas rotas.