SINOPSIS: Georges y Anne, los ochenta cumplidos, son dos profesores de música clásica jubilados que viven en París. Su hija también se dedica a la música, y vive en Londres con su marido británico. Un día, Anne sufre un infarto. Al volver del hospital, un lado de su cuerpo está paralizado. El amor que ha unido a la pareja durante tantos años se verá puesto a prueba.
Amour se entrega a la cartelera nacional luego de su paso por todas las premiaciones importantes –dentro de las que incluye el galardón máximo en Cannes 2012 y el Oscar a mejor película extranjera hace pocos días.
Michael Haneke, su director, acostumbra a tratar sus historias –de las que es siempre también su guionista –con crudeza, certeza y sin lugar a eufemismos. Y si bien en esta ocasión estamos frente a una obra con tales características, encontramos en ella tal vez la película más íntima y sentida del creador austriaco.
Amour batalla en su desarrollo como lo hacen sus protagonistas –Trintignant y Riva correctísimos –en cada escena. Con lentitud, con una asfixia creciente frente al final que se acerca reptando dentro de las paredes del apartamento donde ocurre casi toda la película.
El centro y nexo de toda la película es el tema de la soledad y cómo se enfrenta desde la perspectiva de una pareja de edad ya avanzada que contempla cómo se desmorona su castillo de toda una vida y poco puede hacer al respecto. Una cinematografía fría, una casi carencia de música de fondo, una puntada que nos adentra tanto en su profundidad que duele.
Amour es políticamente incorrecta, moralmente cuestionable, y aquello no es problema para Haneke. Pues se debe repasar la película luego de vista, ya que aunque al salir de la sala hayamos sentido ese peso sordo de haber asistido a una especie de extenuante funeral, un mensaje es claro, simbolizado constantemente en su desarrollo con el piano, las pinturas del apartamento o los planos fijos de las habitaciones.
Una película difícil de digerir, pero completamente recomendada a quienes buscan en el cine más que entretenimiento. Esta es una obra tan sensible como común, y retrata de forma precisa el momento de la vida que quizás muchos vayamos a vivir o hayamos presenciado en algún familiar cercano en sus últimos días. Todo esto ensalzado por una Emmanuelle Riva perfecta en su papel y –en pos del afán de cercanía juvenil de los Oscar –injusta perdedora como mejor actriz.
| Director: Michael Haneke Protagonistas: Jean-Louis Trintignant, Emmanuelle Riva País: Austria Año: 2012 Duración: 2h 07m. |
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En verdad una película conmovedora, terrible en cierto sentido pero reveladora y muy al hueso. Totalmente merecedora de los premios que ha ganado.
Esta clase de películas espero para verlas en casa. No se si el ambiente “cine” me la hará mas emotiva. Pero todos han hablado correctamente de ella, que quizás me arranque un par de horitas.
Me encanta :C