[Review de cine] John Wick 4: Nuevas oportunidades aparecen en el horizonte

Ya más de 8 años después del estreno de la primera entrega, tenemos el cuarto capítulo de la saga John Wick en nuestras salas de cine. Después de ser traicionado y dejado por muerto en la última película, nuestro héroe tendrá que recurrir a viejas amistades de todo el mundo para prepararse para el asalto final contra la Alta Mesa. Sin embargo, un nuevo campeón ha sido invocado por la organización para hacerse cargo de John Wick haciendo uso de todos los medios y recursos que vea necesario. ¿Podrá nuestro protagonista escapar de su propio destino?

Uno pensaría que ya en la cuarta entrega de una franquicia de acción dejarían de haber sorpresas, y es ahí donde nos pillaron por sorpresa. Con una duración de 2 horas y 40 minutos, esta es probablemente la entrega más ambiciosa de las cuatro. Esto ya que profundizaron aún más el mundo, sentando las bases para posibles continuaciones y/o spin-offs de otros personajes. Y hablando de eso, esta cinta también nos presenta a un elenco bastante grande de nuevos aliados y enemigos, lo que solo confirma mis sospechas de que algo se está preparando tras bambalinas.

En cuanto a la película en sí, tenemos que hablar de su tiempo. Como se dijo previamente la duración en total es la mayor de todas, pero esto a su vez le juega en contra, ya que el inicio es algo lento debido a que se tomaron su tiempo en ponernos en contexto con la situación actual de los personajes ya establecidos. Para posteriormente presentarnos nuevos personajes que influirán con notoriedad en la trama. Esto resulta en una estructura predecible en la que tenemos avances de la trama sin demasiada acción, seguidos inmediatamente por las grandes escenas de acción tan bien coreografiadas que conocemos. Esta fórmula se repetirá tres veces a lo largo de film, pero cabe recalcar que el desenlace de acción final de la película es bastante extenso y compensa cualquier espera anterior.

En cuanto a las escenas de acción, solo puedo decir que Chad Stahelski lo hizo una vez más. No hay sorpresa alguna que Keanu Reeves es su media naranja a la hora de llevar estas complejas escenas de acción a la vida, pero esta vez él no es el único debajo del foco. Haciendo uso del nuevo y ampliado elenco de personajes, el director les ha dado sus propias escenas a cada uno para que puedan destacar y que los espectadores se interesen en ellos. Todo esto sin el propósito de quitarle protagonismo a John Wick, si no que elevarlo. Al fin y al cabo, la grandeza de un héroe es comparable con la fuerza de los villanos a derrotar.

Pase lo que pase en la película, está claro que esto no es lo último que veremos de estos personajes y de este mundo. Sin embargo, recomiendo encarecidamente el vivir la experiencia de ver este film en la pantalla grande, en especial a aquellas personas que se han encariñado ya con aquel sicario de trasfondo triste allá por el año 2014.

John Wick 4 es la entrega más ambiciosa de esta franquicia de acción. No solo por ser la de mayor duración, pero también por tener el mayor elenco de personajes y el mayor desarrollo de mundo sin disminuir la calidad de la obra ni un poco.