SINOPSIS: Existen otros mundos además de éste. El último Caballero Guerrero, Roland Deschain (Idris Elba), ha estado enfrascado en una batalla eterna con Walter O’Dim, también conocido como El Hombre de Negro (Matthew McConaughey), decidido a impedir que éste derribe la Torre Oscura que mantiene unido al universo. Con el destino de los mundos en juego, el bien y el mal colisionarán en la batalla final en la que sólo Roland podrá defender la Torre de El Hombre de Negro.
La Torre Oscura es la versión cinematográfica basada en el universo de ciencia ficción, western del reconocido escritor estadounidense Stephen King, con una saga que, a la fecha, suma ocho novelas y un sinfín de obras relacionadas en su vasta bibliografía.
Esta suerte de adaptación –aunque es más una historia más propia de los guionistas y director –corre por su salvación con altibajos, pero permitiendo su disfrute, sobre todo, a quienes en su vida habían escuchado y/o leído algo de los libros del autor norteamericano, ya que si bien en los diálogos hay algunas explicaciones –o faltas de éstas –enredadas o poco profundizadas, permite al espectador novel poder adentrarse sin mucha dificultad en el mundo narrado.
Para los fans más puristas y enceguecidos puede resultar una película mala, pero se debe siempre analizar en una reflexión más pausada, la obra por sí misma, aunque sea por un instante sin guiarse por su obra madre –en este caso los libros –y más considerando que siempre ha sido difícil adaptar a King.
El desarrollo de la historia tiene algunos tropezones que más que problemas de arte, se entienden más por los inconvenientes previos al estreno entre estudio y director. Pero el producto final igual se entiende y las actuaciones son precisas, incluyendo a Tom Taylor (Jake) que sobresale como el personaje eje.
La Torre Oscura, con su hora y media de duración, logra entretener, pasar un rato agradable en el cine, aunque puede que le haya faltado un poquito más de acción, pero por lo menos es algo distinto, y no se alarga innecesariamente como muchos “blockbusters” de dos horas y media repetitivos.
Director: Nikolaj Arcel |