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SINOPSIS: Osamu y su hijo se encuentran con una niña en mitad de un frío glacial. Al principio, y después de ser reacia a albergar a la niña, la esposa de Osamu aceptará cuidarla cuando se entere de las dificultades que afronta. Aunque la familia es pobre y apenas gana suficiente dinero para sobrevivir a través de pequeños delitos, parecen vivir felices juntos, hasta que un accidente imprevisto revela secretos ocultos, poniendo a prueba los lazos que les unen.[/box]
Somos una familia es una de las cintas nominadas a los premios Oscars 2019 como Mejor película en lengua extranjera, para lo que compite con una de las favoritas que es Roma. La cinta podrán encontrarla en las salas de Arte del Cine Hoyts y en el Cine El Biógrafo desde el 21 de febrero.
Como nos dice la sinopsis es la -aparentemente- simple historia de una familia pobre que subsiste como puede con trabajos miserables y pequeños robos. Sin embargo, a pesar de todo eso son un grupo unido que se cuida entre sí y se protege. Tanto es así que acogen a una pequeña niña, Lin, que se encuentran y que parecía tener hambre, aunque intentan devolverla se dan cuenta de que era maltratada por sus padres, por lo que optan por conservarla.
No quiero entrar en detalles de los motivos de la familia o sus historias porque parte de la belleza de la cinta es ir descubriéndolo a medida que avanza. Sin embargo, es un relato que nos habla de la familia, de la familia en el sentido menos convencional. Familia como aquel grupo de personas que escogemos para amar y que nos aman por su propia elección, no porque tengan el deber moral de hacerlo. Y sí, es algo que hemos visto en otras cintas, pero acá entra en juego la forma de vida que tienen. Ya que no se les puede clasificar de “buenas personas” por los robos que cometen, y, al mismo tiempo, tampoco podemos decir que no lo sean al ver la forma desinteresada en la que acogen a Lin. La cinta hace un gran trabajo mostrando esa dualidad de las personas y nos trae a personajes tan reales que difícilmente se les puede llamar personajes.
Es cierto que cada miembro de la familia cometía errores y que dentro de su forma de ver las cosas no eran crímenes; por lo que por momentos no es sencillo entenderlos o ponerse en su lugar. No obstante, a medida que vamos entendiéndolos y que nos damos cuenta de la forma en que se cuidan nos encariñamos más y más con ellos. Por lo mismo, sabemos que viven en un frágil equilibrio que puede llevar su estilo de vida y familia al final en cualquier instante. Aspecto que ellos también saben y aceptan, porque a pesar de vivir como lo hacían eran conscientes de que no era del todo socialmente correcto y que en algún momento tendría que acabar.
El final además de potente me pareció hermoso, en particular por las escenas de Nobuyo (quien era la madre) y su misma relación con la maternidad y el cómo lo ve el mundo. Es un tema que ha estado en boga el último tiempo y me pareció muy buena la forma en que es abordado. En palabras muy simples la cinta nos dice que madre es aquella que ama, no la que da a luz.
Para terminar, Somos una familia es una película hermosa y emotiva sobre la familia, sobre esos lazos que nos mantienen unidos y que nos llevan a preocuparnos por otros. Un vistazo diferente a la maternidad y a la paternidad. Una cinta que nos demuestra los anticuados y estructurados que son los conceptos convencionales que definen a una familia.
Director: Hirokazu Koreeda.
Elenco: Lily Franky, Sakura Andô, Mayu Matsuoka, Jyo Kairi, Miyu Sasaki.
Año: 2019.
País: Japón.
Duración: 2 hr. y 1 min.