[Review de libro] La teoría del amor: una entrega que sigue la línea de las anteriores, pero logra diferenciarse

Con solo dos libros, Ali Hazelwood ha conquistado al mundo con sus historias de romance dentro del STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) siempre con mujeres científicas lidiando con las dificultades dentro del mundo académico. Es probable que sea lógico debido a que es el más reciente hasta la fecha, por lo que la autora ha ganado más experiencia, pero este libro es el que mejor trató el tema de mujeres en ciencia, además de otras “denuncias” bastante interesantes.

La vida después del doctorado no es fácil para Elsie, trabaja haciendo clases y fingiendo ser novia de otras personas para poder pagar las cuentas, pero sueña con su propia oficina para investigación. Por eso, cuando le conceden la entrevista al trabajo de sus sueños hará todo lo posible por conseguirlo, lo único que no esperaba era encontrar al hermano mayor de uno de sus clientes.

Partamos por lo ya conocido y que son los clichés que sabemos que encontraremos en las novelas de Ali Hazelwood. En este libro volvimos a tener la clásica relación de rivales a amantes, pero solo desde la visión de Elsie, pues era evidente desde el inicio que Jack estaba enamorado de ella, solo que no era bueno transmitiéndolo y había unos problemas de comunicación entre ellos. Mientras que Elsie se imaginaba una y otra vez que Jack la odiaba, que quería acabar con su trabajo y cosas por el estilo; Jack solo buscaba formas de protegerla y ayudarla. Si disfrutaron esta dinámica en los otros libros, acá es probable que vuelvan a hacerlo.

“Necesito que seas tú quien nos mantenga a raya. Necesito que seas tú quien marque el ritmo, porque sea cual sea el sitio al que vamos… Yo ya he llegado. Ya hace tiempo que estoy ahí”.

Elsie fue una protagonista interesante, pues estaba acostumbrada a adaptarse a las otras personas para caer bien porque creía que tenía que siempre estar ganándose ese espacio, que si no era perfecta para las personas a su lado (en todos los sentidos), estas personas dejarían de quererla. Eso la llevó a ser incapaz de reconocerse a sí misma, Elsie no sabía quién era si no estaba fingiendo para alguien más. A lo que se sumó el tema familiar de que siempre se le pedía estar lidiando entre sus hermanos ya adultos y minimizando los problemas que ella tuviera. Nos pareció que Elsie y su forma de ser era un reflejo de una forma de crianza bastante común para las mujeres de esa edad.

Por otro lado, Jack conoció a Elsie como la novia de su hermano, su persona favorita en todo el mundo, y para su desgracia supo desde ese momento que la quería. Por ese motivo, se obligó a alejarse y casi no interactuar con ella para controlar sus sentimientos. Sin embargo, al descubrir que ese romance era falso debido al trabajo de Elsie, su actitud cambió por completo. Algo muy lindo fue la forma en que Jack cuidaba de Elsie, pues no venía de una manera paternalista o condescendiente, sino que del cariño y la preocupación. Elsie no estaba bien, necesitaba apoyo, solo que se veía incapaz de pedirlo, por eso él tenía que buscar otras formas de dárselo.

“Valoro mis nuevos sentimientos. Los atesoros. De vez en cuando los estudio, les doy la vuelta, los observo como si fueran fruta madura que he arrancado de un árbol misterioso, uno que ni siquiera debería crecer en mi jardín. Y cuando me la meto en la boca para tragármela entera, tiene un sabor amargo y delicioso a la vez”.

Elsie era una física teórica cuyo sueño era tener su oficina y poder dedicarse a la investigación, mientras que Jack era un físico experimental que en cuya adolescencia humilló a la física teórica, alimentando más la animadversión entre estas ramas de la física. Sin embargo, no es sencillo para los doctores recién titulados encontrar trabajo, por lo que Elsie trabajaba en la universidad haciendo clases, algo que odiaba profundamente y apenas le daba dinero, por lo que se vio obligada a trabajar como novia falsa. La misma autora al final quiso hablar de las malas condiciones laborales que suelen haber para los profesores asistentes de la universidad, aquellos que deben revisar los trabajos, contactar con los alumnos y prácticamente llevar el peso del curso sobre sus hombros. Al mismo tiempo, Ali habló del lobby en el mundo académico y el cómo por más que sean personas de ciencia, siempre existe un aspecto político detrás de las decisiones que se toman.

En nuestra opinión, de los tres libros, este es el que está mejor conseguido, pues tanto los personajes y la forma en cuya relación se dio se sintió más natural. Es nuestro romance favorito entre los tres, además fue el que tuvo más escenas spicy, al mismo tiempo el que fue más maduro en el cómo funcionó. Por otro lado, al mismo tiempo fue el que tocó temás más importantes sobre el mundo académico y que realmente se sintió como una especie de denuncia por momentos.

La teoría del amor siguió la misma línea de todos los libros de la autora, pero en el buen sentido y, para nosotros, incluso mejor. Entregó todo lo que sus lectores pueden esperar: mucho romance, tensión, humor y varias escenas spicy entre sus protagonistas.

Ali Hazelwood (Italia)-. Es el seudónimo de una profesora italiana de neurociencia y escritor de novelas románticas. Sus historias se centran en mujeres en los campos STEM y académicos. Su primera novela, The Love Hypothesis, fue un éxito de ventas del New York Times.